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Es bien sabido que los árboles pueden provocar daños a la estructura de las construcciones, en blogs anteriores hablamos sobre las afecciones a las cimentaciones que provocan, ahora es momento de cubrir los techos que no están exentos de daños.

Antes de tomar una decisión sobre qué hacer, es fundamental considerar la opinión de un profesional arborista. Los árboles no únicamente mejoran la apariencia estética de los lugares donde se colocan, también generan sombra, aportan verdor y fragancias, pero, al ser seres vivos necesitan cuidados para mantener su forma, tamaño y no menos importante evitar riesgos. 

Hay muchas maneras en que los árboles pueden reducir la vida de su techo y sus tejas a menos que se intervenga para prevenirlo.

DAÑOS

1. Caídas en los techos

Siempre existe la posibilidad de que su árbol se caiga en el techo si está dañado, enfermo o demasiado débil para soportar una tormenta de viento.

2. Caídas de ramas

¿Pueden las ramas de los árboles dañar el techo? Sí, incluso las ramas pequeñas pueden rayar los techos de la misma manera que rayarían una ventana. Si una tormenta los hace volar del árbol, es posible que encuentren la manera de dañar sus tejas. Varias ramas grandes pueden añadir demasiado peso a su techo o incluso causar abolladuras en el impacto, tal como lo haría un árbol caído.

3. Sombra excesiva

Un poco de sombra es un beneficio en el verano para ayudar a mantener su casa fresca. Por otro lado, demasiada sombra puede dificultar que su techo se seque. Si permanece húmedo por mucho tiempo, su techo puede desarrollar moho y crecimiento de algas.

Pero entonces, ¿qué podemos hacer para evitar estos daños?

MODO DE PREVENCIÓN

1. Talar árboles inestables

Los árboles que son inestables o están gravemente enfermos deben ser talados rápidamente antes de que tengan la oportunidad de caer sobre su techo.  Pero, siempre se debe tener en consideración la legislación vigente, puesto que ciertas especies que ya se encontraban plantadas son protegidas por su valor ecológico. y no pueden ser taladas.

2. Eliminar ramas

Recortar todas las ramas que estén demasiado cerca del techo. Es mejor pedirle a un arborista que quite las ramas que sobresalen, ya que podrán proteger su techo mientras trabajan

3. Podar

La poda será su mejor aliada para controlar el crecimiento de los árboles. Siempre es mejor dejársela a un experto puesto que existen muchos tipo de poda que dependerán del propósito de nuestro árbol.

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